Descripción
Dragon Ball The Breakers Special Edition
Es un multijugador asimétrico de siete contra uno en el que un grupo de civiles sin poderes tiene que enfrentarse a uno de los grandes villanos de la saga de Akira Toriyama, como Célula o Freezer.
Aunque no dispongan de habilidades sobrenaturales, los civiles tienen varias maneras de plantar cara al asaltante: cuentan con varios gadgets que les permiten saltar más alto, desplazarse más rápido o esconderse tras una bomba de humo.
También hay objetos que pueden desbloquear para disparar al villano tanto munición como ráfagas de energía al más puro estilo Super Saiyan.
El objetivo, como en muchos otros juegos del género, es escapar de la zona sin que el villano mate a todo el mundo.
Hay varias formas de conseguirlo, siendo la principal obtener una serie de llaves especiales que activan una máquina del tiempo; esto es porque el contexto narrativo del juego es que ha habido una falla en el espacio-tiempo y se han generado pequeñas dimensiones en las que estos villanos llegan a destruirlo todo, una vaga premisa que apenas sostiene el núcleo jugable.
En base a eso, también hay una base segura que sirve como hubcentral, con tiendas, NPC y sistema gachapón.
Mejor como villano que como civil
Por otro lado están los asaltantes, villanos clásicos de Dragon Ball que tienen el objetivo de impedir la huida de los civiles.
Empiezan en su primera forma, la más básica, y a medida que consumen a los jugadores se van haciendo cada vez más fuertes.
Por supuesto, estos personajes no saben dónde están los supervivientes hasta que no los ven en pantalla, así que el juego se convierte en una especie de escondite.
El asaltante, que juega solo, sí tiene poderes especiales, e incluso puede llegar a destruir zonas completas del mapa dejándolas inutilizables para los civiles.
Suena obvio decirlo y es algo que ocurre en casi todos los multijugadores asimétricos, pero en Dragon Ball: The Breakers tomar el rol del villano es mucho más estimulante que jugar como civiles.
Los asaltantes
Quizás aquí esa sensación se agudiza más debido a que los asaltantes son personajes conocidos y los supervivientes no (a excepción de algunos como Bulma o Uulong) , pero también porque los civiles tienen muchas menos opciones contra los asaltantes que en otros videojuegos: a fin de cuentas, los villanos de Dragon Ball representan a los seres más poderosos del universo, ¿quién podría hacerles frente si no súper guerreros de poder similar?
A fin de cuentas, los civiles sólo pueden huir y esconderse, utilizando su astucia para dar esquinazo a los villanos.
Hay veces que esta idea da pie a situaciones de tensión que se convierten probablemente en lo mejor del juego: la sensación de indefensión ante la amenazante mirada del villano de Dragon Ballque nos busca desde los aires.
También son destacables algunos momentos de cooperación entre jugadores, cuando alguien utiliza el poder de transformación (que permite a los supervivientes adoptar los poderes de los grandes héroes de la saga, como Goku, Vegeta o Piccolo) para distraer al asaltante mientras activan la máquina que se necesita para huir y ganar la partida.










